Estos tomates confitados son un exquisito bocado que te alucinarán desde el primer momento. Ideales como acompañamiento, sabrosísimos en tostadas, brochetas e incluso en ensaladas y pasta, toma nota de nuestra receta porque están deliciosos
El tomate es una fruta, sí, sí, como lo oyes, una fruta deliciosa, sabrosa, jugosa y sin la que muchas personas podríamos entender la cocina. A nosotras nos encantan de todas las maneras, frescos, al horno, el salsa y por ello hoy os queremos acercar esta receta de tomates confitados, muy sencilla, deliciosa y rápida que te puede sacar de más de un apuro.
INGREDIENTES TOMATES CONFITADOS
- Tomates cherrys
- AOVE, vinagre, sal y pimienta
- Opcional, otras especias al gusto
Estos tomates confitados son unos bocaditos exquisitos, como pequeños bomboncitos rojos llenos de sabor que explotan en la boca. Su preparación no entraña ninguna dificultad y quedan increíbles. ¡Vamos allá con la receta!
Primero haremos unos cortes poco profundos en forma de cruz en los tomates que nos ayudarán a quitarles la piel una vez estén escaldados. Pondremos una olla a hervir y cuando el agua esté bien caliente escaldaremos los tomates cherry. Los dejaremos hervir entre 10 y 40 segundos, lo justo para que se abra la piel y la podamos retirar sin dificultad. Una vez veamos la piel abierta de los tomates, los colaremos y dejaremos que se enfríen un poquito para poderlos manipular sin quemarnos los dedos.
Seguidamente, les retiraremos la piel y los pondremos en un recipiente que podamos tapar. Los salpimentaremos y añadiremos aceite de oliva virgen extra y vinagre a nuestro gusto que penetrará dentro de la carne del tomate. En este punto, si quieres añadir otras especias, puedes hacerlo. A nosotras, así nos encantan. Mezclaremos bien todos los sabores y dejaremos que los tomates se empapen bien de esta vinagreta tan sabrosa y sencilla, mínimo 3 horas. Siempre mejor ponerlos dentro de la nevera y, si puedes hacerlos de un día para otro, estarán aún más deliciosos.
Para comerlos, puedes acompañarlos de una tostada con burrata, una brochetta con mozarella y berenjena o comértelos tal cual como acompañamiento. Están simplemente deliciosos, júzgalo tú misma.