Si quieres aprender a hacer esta salsa clásica de la cocina mexicana, toma nota. Hoy te contamos el secreto para hacer un guacamole infalible y con mucho sabor
El guacamole es un plato mexicano tan delicioso, fresco y apetecible que ha traspasado fronteras. Es ya un patrimonio universal de la cocina mexicana ideal para comer de aperitivo. ¿El secreto de su éxito? Según nuestra opinión es por muchos motivos, pero principalmente porque es una salsa cremosa, refrescante, chispeante, fácil de hacer y muy nutritiva.
Con el guacamole, pasa como con la tortilla de patatas española o la tartiflette francesa, ¡hay infinidad de recetas! Pero hoy te vamos a explicar una receta infalible que te transportará a México en un abrir y cerrar de ojos.
INGREDIENTES PARA 2 PERSONAS
- 2 aguacates maduros
- 1 tomate pequeño
- 100 gr de cebolla
- 1 chile jalapeño picante (opcional)
- Hojas de cilantro fresco
- Zumo de media lima
- Sal
CÓMO HACER UN GUACAMOLE ESPECTACULAR
Lo primero que haremos para hacer un guacamole para chuparse los dedos es cortar la cebolla y el chile jalapeño (es opcional ponerlo o no) en brunoise o en daditos pequeños. A continuacion pelaremos el tomate, le quitaremos las semillas y lo cortaremos en dados pequeños o mirepoix.
Pondremos estos ingredientes juntos en un bol y le añadiremos el zumo de media lima. Removeremos bien y reservaremos. Seguidamente picaremos las hojas del cilantro que le darán ese sabor tan característico y refrescante al guacamole y lo añadiremos junto con los otros ingredientes.
Solo nos queda abrir los aguacates por la mitad, retirar los huesos con cuidado de no cortarmos y sacar la carne que pondremos en un mortero o en un bol grande. Según los utensilios que tengamos en casa, machacaremos los aguacates en el mortero hasta conseguir la consistencia y textura deseada o los machacaremos con un tenedor.
Finalmente añadiremos el aguacate con los otros ingredientes, pondremos sal al gusto y removeremos bien para que se integren todos los ingredientes.
Serviremos el guacamole fresquito junto con totopos o nachos y si os gusta darle un toque divertido de color, podéis poner encima unos granos de granada que no modifican para nada el sabor pero le da un toque crujiente muy apetecible.