BioCultura tendrá lugar del 9 al 12 de mayo en el Palau Sant Jordi. Conversamos con Ángeles Parra, directora de la feria y una figura fundamental para comprender el desarrollo del sector ecológico en España. Este año, BioCultura cumple 30 años en Barcelona y, en noviembre, alcanza las cuatro décadas en Madrid
Ángeles Parra es una figura clave en el mundo «bio» de Cataluña y España. Con 63 años de edad, ha dedicado toda su vida a promover la agroecología, la salud, el medio ambiente y la justicia social y, como directora de BioCultura y presidenta de la Asociación Vida Sana, su labor es esencial para impulsar un estilo de vida más saludable, sostenible y consciente en nuestra sociedad.
Este año BioCultura regresa a Barcelona del 9 al 12 de mayo en el Palau Sant Jordi, marcando su trigésimo aniversario en la ciudad condal y, Madrid celebrará sus cuarenta años en noviembre. ¡Una hazaña notable que hay que celebrar! En EasyOrganic Magazine nos sumamos a esta fiesta de 4 días que será la cita catalana. Somos Media Partners de BioCultura y nos encanta transmitir la importancia que tienen eventos como este en el futuro de un planeta mejor.
¡Conversamos con Ángeles Parra!
¿Cómo le explicaría a alguien que no conozca BioCultura qué es y por qué es importante su celebración?
Es la gran feria de referencia en promoción de alimentos ecológicos y consumo responsable. Esto sería una definición más o menos oficial. Pero, en realidad, BioCultura es mucho más que una feria. Es como una especie de manual para un gran cambio hacia la sostenibilidad verdadera, la armonía de la Humanidad con la Naturaleza y la Justicia Social.
¿Cuál ha sido el impacto de eventos como BioCultura en la manera en que la sociedad percibe y consume productos ecológicos?
Ha sido un impacto extraordinario. Cuando BioCultura empezó, hace 40 años en Madrid y 30 en Barcelona, el sector ecológico no existía. No había ni productos, ni empresas ni profesionales. En gran medida, todo se ha ido vertebrando gracias a BioCultura y, en parte, también, a muchas de las otras actividades que organizamos desde Vida Sana. Piensa que al principio, por no haber, no había ni certificación. Nosotros empezamos a certificar habida cuenta del desinterés de las instituciones. Y con nuestros cursos se formaron los primeros técnicos y especialistas en agricultura y ganadería ecológica, así como inspectores de los organismos de control. En fin, cada granito de arena cuenta… Pero BioCultura ha sido más que eso: ha sido todo un revulsivo para el mundo orgánico en España y en Latinoamérica…
Nos hemos mantenido independientes y seguiremos siéndolo. Estamos en esto por el activismo, por el bien común
¿Cómo ha evolucionado la conciencia ecológica de los asistentes a lo largo de los 30 años de la feria?
Ha evolucionado mucho. Antes, los “biocultureros” eran sólo gente muy militante, muy consciente. Ahora, las personas que visitan BioCultura son de muy diversas procedencias, principalmente de edades de entre los 30 a los 50 años. Pero, aunque con intereses muy distintos, sí que coinciden en un denominador común que es el consumo responsable. Nos gusta comprobar cómo BioCultura es un lugar para todos. Pueden disfrutar de ella desde un neo-rural que se ha refugiado en las Alpujarras… hasta la reina Letizia, que por cierto nos visita todos los años… Más amas de casa, empresarios/as, jóvenes rebeldes, gente que se quiere cuidar, muchos profesionales del sector, ciudadanos/as que buscan nuevas vías desde el ámbitos profesional… De todo un poco.
La agroecología aporta soluciones para muchos problemas para poder crear una sociedad, en el futuro y en el presente, no distópica
¿Cuáles han sido los mayores desafíos que ha enfrentado BioCultura Barcelona en su trayectoria de tres décadas y cómo los ha superado?
Es muy difícil montar una feria de estas características sin prácticamente ninguna ayuda. Y sin contar con el patrocinio de grandes empresas que quieren apuntarse al “greenwashing”. Nos hemos mantenido independientes y seguiremos siéndolo. Estamos en esto por el activismo, por el bien común. Obviamente, la feria tiene que ser rentable. Pero lo que en realidad nos mueve es el deseo de descontaminar los cultivos, los ecosistemas y los organismos de los consumidores. De esta forma, combatimos algunos de los grandes problemas a los que se enfrenta la Humanidad. La agroecología aporta soluciones para muchos problemas para poder crear una sociedad, en el futuro y en el presente, no distópica.
BioCultura es un revulsivo para el mundo orgánico en España y Latinoamérica
¿Podría compartir algunas historias destacadas o momentos memorables que hayan ocurrido durante la historia de la feria?
Hay anécdotas muy graciosas y algunas incluso tragicómicas. BioCultura ha sido testigo de tantas circunstancias… Por poner un ejemplo, cuando nos visitaba algún famoso, por ejemplo, Miguel Bosé, hace como 20 años… la persona que se ocupaba de la megafonía de la feria lo dijo por los altavoces y se armó un buen revuelo entre el público presente… En tantos años de ferias en Madrid y Barcelona, Valencia, Bilbao, A Coruña, Sevilla… ha habido de todo. La feria también ha sido testigo de muchos noviazgos que se han producido en BioCultura. Y los hijos de esos matrimonios han seguido viniendo a la feria y han ido creando sus propias empresas en el universo orgánico.
Lo que pasa en la sociedad se acaba manifestando en BioCultura
En su opinión, ¿cuál es el papel de BioCultura BCN en la promoción de un estilo de vida más sostenible y consciente?
Somos un agente del cambio, del gran cambio que la Humanidad necesita. Damos información sobre los problemas que nos acechan y sobre las soluciones pertinentes. E informamos sobre aquellas empresas que ya están produciendo según las coordenadas del nuevo paradigma. Somos el lugar de encuentro de todos los eco-emprendedores, y al mismo tiempo motor y escaparate de sectores que crecen y se desarrollan… Y no solo en alimentación, sino también en productos cosméticos, moda sostenible, etc. Somos el manual del camino de todos aquellos productos y servicios para una vida consciente y sostenible de verdad.
¿Cómo ha respondido la feria a los cambios en las preferencias y demandas de los consumidores en cuanto a productos ecológicos en diferentes áreas como alimentación, moda y cosmética a lo largo de los años?
Nosotros somos una feria y, por tanto, somos un reflejo de la sociedad. Es decir: lo que pasa en la sociedad se acaba manifestando en BioCultura. Pero, al mismo tiempo, hemos sido y somos creadores de tendencias. Se nota mucho, por ejemplo, ahora mismo, en los ámbitos de la ecocosmética certificada y del textil sostenible. Somos punta de lanza de tendencias que más tarde, como ha ocurrido con la alimentación ecológica, pasarán a ser preferencias muy asimiladas por una gran parte de la población. En la feria, los ciudadanos tienen la oportunidad de conocer directamente a productores, fabricantes, artesanos…. Es decir, a las almas que hay detrás de cada producto, de todo aquello que consumen; y, al mismo tiempo, se programan multitud de actividades para formar, informar y crear conciencia basada en información libre e independiente.